El barco procedía a la misma velocidad dando una sensación de increíble tranquilidad. Sentado con los ojos entrecerrados, dejando filtrar reflejos brillantes, aumentaba la percepción de los pensamientos y uno en particular. Habían pasado muchos meses ya y todavía en varios momentos como esto de calma o a débito de pequeños enganches memoriales, como un color que le recordaba su pelo rubio o una canción romántica, Marc siempre tenía que enfrentarse con un sentimiento de difícil definición. El suyo fue un sueño que se interrumpió con increíble rapidez, un hecho al cual no se puede volver y además si hubiera podido volver nunca habría estado como antes . La Sensación que el probaba era privación sin sentido no solo de una persona sino de un Mundo que ella misma representaba. Marc se tiró de repente en el agua esperando de limpiarse el alma y corazón, inundándose en el mar, para que pudiese así empezar nuevamente a aceptar un sentimiento de AMOR que disolviera todos sus sufrimientos.